jueves, 27 de junio de 2019

ENTRENADOR


El reciente traspiés que sufrió la Selección Nacional de Fútbol de Honduras obliga a efectuar algunas consideraciones sobre los factores que determinan que un equipo participe con éxito en las contiendas internacionales que le corresponden.
El desempeño de un equipo de fútbol depende fundamentalmente de las decisiones atinadas de las autoridades deportivas; la capacidad financiera y física del país en cuanto a las instalaciones en donde se realizan los entrenamientos; la capacidad, experiencia y habilidad del entrenador; la capacidad, experiencia y habilidad de los jugadores; y la aplicación de la justicia de los árbitros en el terreno de juego.
En esta oportunidad, se considerará únicamente lo concerniente al papel de los entrenadores. Un entrenador de fútbol desempeña una profesión compleja. Debe tener formación teórica y práctica sobre esta disciplina deportiva. Además, debe conocer perfectamente toda la normativa que regula este deporte en el nivel nacional e internacional.
Adicionalmente, el entrenador de fútbol debe contar con rasgos de líder, mentor, orador, sicólogo y tener conocimientos de medicina deportiva.  Tiene que contribuir a corregir comportamientos de jugadores que provienen de esquemas familiares diversos.
Finalmente, un entrenador de fútbol debe ser un experto en relaciones públicas. Debe mantener buenas relaciones con los dirigentes que lo contratan; con la prensa deportiva; y con los millones de aficionados convertidos en “entrenadores de facto” y que esperan y exigen que la selección gane siempre. Como que los juegos de fútbol funcionaran como monólogos.
Se necesita dotarse de determinación y pasión para ser entrenador de fútbol. Comparada con otras profesiones, la evaluación pública y el margen de error que les es permitido a los entrenadores de fútbol es exageradamente reducido.
Con connotaciones planetarias, el fútbol puede ir acompañado de algunas alegrías y de muchas desilusiones. Sin ser los que están en primera línea de beneficiados en cuanto a los ingresos que genera este deporte, los entrenadores de fútbol son después de los árbitros, los profesionales más vilipendiados en el mundo de la magia de las competencias futbolísticas.


viernes, 14 de junio de 2019

CASOS LEGALES


En algunas áreas del derecho, los abogados recurren al apoyo de profesionales de otras disciplinas para fortalecer sus argumentos y garantizarse que tienen un “caso” para ganar frente a las cortes. Sin embargo, la determinación de la factibilidad de éxito de una demanda legal recae fundamentalmente en los conocimientos, el criterio, manejo de los hechos y la diligencia de los profesionales del derecho.
Por ejemplo, la elaboración de un dictamen pericial tiene relevancia como elemento de prueba y medición de la pretensión de un demandante que considera conculcados sus derechos. Nada más. La decisión de solicitar un dictamen pericial es responsabilidad y prerrogativa del cliente y su abogado, por un lado, o del juez, cuando sea el caso.  Cuando un perito es buscado para formular un dictamen, este profesional asume que ya se han realizado las respectivas valoraciones e investigaciones jurídicas que sustentan la validez del caso.
No puede pretenderse en ninguna circunstancia, que el perito conozca todos los detalles legales que hacen viable un caso en primera instancia. Se recalca, esa es tarea del abogado. El perito está obligado a conocer los estamentos legales fundamentales en los que basará su medición, así como, las metodologías y los criterios técnicos que sustenten sus cálculos y conclusiones.
El perito puede contribuir en la estrategia de la demanda, pero estrictamente desde ángulo de su especialidad. Puesto que, en un caso, hay dos partes: el demandante y el demandado, la construcción de escenarios de cómo puede responder la otra parte a los argumentos de la primera, puede ser objeto de un análisis detenido y conjunto entre el abogado y el perito. Hasta ahí nomás.
Quizás, aquí vale la pena plantear una analogía. Cuando usted va donde el médico por una dolencia, su doctor le recomienda una serie de exámenes para validar el diagnóstico clínico. Los laboratoristas y los radiólogos, por ejemplo, presentan los resultados al médico, absteniéndose de sesgar los elementos de criterio del facultativo para establecer los siguientes pasos para contrarrestar la enfermedad del paciente.
En cualquier caso, los peritos como intervinientes en una demanda legal plantean sus criterios y conclusiones circunscritos al ámbito de su conocimiento, experiencia y formación profesional. Su rol, sólo forma parte de un esquema global dentro del planteo de una demanda. En caso de no atenerse a esta premisa, el perito puede exponerse a que le apliquen el adagio: “zapatero a tus zapatos”.

domingo, 2 de junio de 2019

PERDIDOS


Hace unos 40 años, 5 centroamericanos coincidieron en Taiwán para recibir un curso sobre desarrollo agrícola en la ciudad de Taoyuan a 42 kilómetros de Taipéi.  Al segundo día de su arribo, uno de los integrantes sugirió visitar Taipéi. Tomaron un bus que consumió 45 minutos en el trayecto. Todo iba bien.  Conocieron Taipéi a pie, hasta que la tarde cayó y las sombras de la noche, cubrieron con su oscuro manto, la ciudad.
Los intrépidos exploradores buscaron el retorno en el lugar donde se habían bajado del bus. Infortunadamente, no era allí la estación de regreso. El grupo, buscó puntos de referencia y los rótulos luminosos en mandarín sólo aumentaron su confusión y su angustia. Empezaron a preguntar a transeúntes chinos que no hablaban ni una palabra de inglés. Después de varios intentos, abordaron a un peatón que hablaba inglés, era ingeniero electricista e incluso había viajado a México. El amable ingeniero, le devolvió la vida al grupo.
El ángel providencial taiwanés casi tomó de la mano a los aventureros visitantes; los llevó a la estación de buses hacia Taoyuan; le dio instrucciones al conductor; y finalmente, pagó el pasaje de los 5 atrevidos.
Una vez en Taoyuan, el grupo no tenía idea donde bajarse del bus lo mas cerca del instituto. A la mano de Dios, descendieron donde supusieron estaban cerca de su destino; pararon un taxi y le mostraron al conductor un folleto con la dirección del instituto en inglés y mandarín. El taxista entendió y llevó a puerto seguro a los aventados visitantes.
Cuando hay oportunidad de visitar y conocer otros lugares, una pizca de aventurero puede hacer el viaje una experiencia excitante. Pero es preferible tomar algunas precauciones sobre hasta donde debe llegar el arrojo de los visitantes, particularmente cuando la lengua local es totalmente diferente al idioma que manejan los turistas.
Para el caso de quienes hablan una lengua romance, la lectura de rótulos en idiomas similares puede facilitarse. Pero, a medida que, los idiomas van tomando otros alfabetos y símbolos, la situación de la comunicación se complica y puede acarrear consecuencias inesperadas.
El sólo hecho de salir del país nativo, ya es un reto en sí. Pero los viajeros no deben esperar que encontrarán por el mundo a un buen samaritano, como el ingeniero taiwanés de esta historia, que los sacará del embrollo de haberse perdido en un bosque de la China.