jueves, 19 de octubre de 2017

CONTRAVIA

La pareja entraba con todo y carretilla en el área de caja del supermercado solicitando permiso para pasar. Cuando el cliente en turno de pago les indicó que se conducían en contravía, con la mayor frescura, el transgresor de reglas indicó “no somos perfectos”.
Arropados en el pretexto de la imperfección, en algunas sociedades existe la arraigada inclinación a irrespetar ya sea por ignorancia o por desprecio al orden, las elementales reglas para conducirse correctamente en convivencia.
Dirigirse contravía no es monopolio de los automovilistas que se conducen en la calzada por la vía contraria, exigiendo que aquellos que van correctamente, se aparten.
La actitud contravía está incrustada en los más altos niveles de la población, cuando un político, en contra de las reglas constitucionales establecidas accede a un puesto de diputado al Congreso Nacional y 16 años después, a fuerza de acostumbrarse a irrespetar todas las leyes que se atraviesen en su camino, pretende perpetuarse en el poder en un país en donde la reelección está prohibida.
Otros comportamientos contravía ponen en riesgo la vida de aquellos que irrespetan las elementales reglas de seguridad vial e ignoran los puentes peatonales para cruzar la calle poniendo en peligro su vida y la de los conductores. O las niñas que en el despertar de la pubertad se convierten en niñas madres con la complicidad de mozalbetes irresponsables, y enfrentan a edad temprana desde un alumbramiento riesgoso hasta un anticipado futuro precario extendido a sus hijos y a su familia por el resto de su existencia.
El comportamiento obstinado, inconsecuente e injustificado de subalternos hacia sus jefes es otro rasgo peculiar del comportamiento contravía. En el ámbito laboral, la resistencia a respetar las reglas repercute adversamente en la productividad y a veces pone en riesgo la propia seguridad de los empleados rebeldes.
Respetar las reglas, es lo más indicado para alcanzar el desarrollo ordenado de una sociedad. La conducta contravía es una estrategia autodestructiva de vida que sólo conduce al desorden, y al caos y revela consecuencias individuales y colectivas dentro del conglomerado social.




No hay comentarios:

Publicar un comentario