sábado, 27 de octubre de 2018

FANATISMO

Según www.definición.de el fanatismo es el apasionamiento del fanático, alguien que defiende con tenacidad desmedida sus creencias u opiniones. Un fanático también se entusiasma o preocupa ciegamente por algo.
De esta manera, se podría determinar que el fanatismo se sustenta o identifica por cinco principales señas de identidad: el deseo de imponer sus propias ideas, el despreciar a quienes son diferentes, el basarse en una serie de ideas que son incuestionables, el tener una visión “cuadriculada” de las cosas pues todo es blanco o negro, y finalmente el carecer por completo de todo espíritu crítico.
La falta de racionalidad puede llegar a tal extremo que, por el fanatismo, una persona mate a otra. Cuando el fanatismo llega al poder político, suele desarrollar todo un sistema para la imposición de sus creencias, castigando a los opositores con la cárcel o incluso la muerte.
Quizá el fanatismo más antiguo es el religioso y se ha manifestado a través de la historia como uno de los mayores ejemplos de intolerancia hacia la libertad de credo de los demás incluyendo la ausencia de este.  
En el recorrido del Siglo XX, el fanatismo político- ideológico a la par de dos guerras mundiales y conflictos nacionales étnico-religiosos fue responsable de grandes genocidios entre ellos el de armenios, judíos, croatas y ruandeses.
Aun en las disciplinas deportivas, principalmente entre las más populares se observan manifestaciones de fanatismo a ultranza en donde los aficionados que no coinciden con las mismas preferencias se convierten en enemigos, que a veces pagan su inclinación con la propia vida.
El fanatismo constituye una arista del autoritarismo de los seres humanos que incluso puede englobar otras conductas, como por ejemplo el fanatismo a sí mismo, que se calificaría como narcisismo, cuando un individuo se auto considera perfecto y llega a convencerse de ser lo mejor en todo, sobre todos y que la nación que le vio nacer debe estar agradecida de su existencia. El narcisista es un hambriento de permanente reconocimiento.  Padece la urgencia de ser tomado en cuenta para todo y por todos.

Los fanatismos político y religioso, en diversos puntos del planeta y en unos lugares más que en otros están provocando existencias miserables a millones de personas en todo el mundo.

jueves, 25 de octubre de 2018

UN LARGO CAMINO

Fuente: ANCESTRY, traducción libre
En los tiempos de antaño no era poco común para las mujeres tener más de una docena de hijos, dado que los estilos de vida agrarios o “vida en el campo” exigía de familias numerosas para trabajar la tierra y mantener la granja.
Lastimosamente, muchos infantes no sobrevivían la infancia, sin mencionar, el gran número de mujeres que morían en los partos. Hoy, los milagros de la medicina moderna hacen que el nacimiento de los bebes sea más seguro, pero durante la primera parte del siglo XX, la tecnología médica neonatal significaba un áspero camino para ambos: las madres parturientas y los recién nacidos.
Antes de 1900, las madres daban a luz en casa, y las parteras eran las primeras asistencias durante la labor de parto; pero debido al aumentado uso de la anestesia (introducida en 1842 por el Dr. Crawford Long) la asistencia de los médicos pediatras se volvió más tarde, normal. En los hospitales, a las madres en labor de parto se les administraba Crepúsculo del Sueño, un coctel de morfina y la droga anestésica, escopolamina que dejaba inconsciente a las mujeres (Se encontró posteriormente que el Crepúsculo del Sueño, borraba de la memoria los dolores de parto en lugar de aliviarlos). Al principio los nacimientos en los hospitales –que a menudo resultaban con infecciones y el uso invasivo de herramientas como los fórceps- contribuyeron grandemente a aumentar las tasas de mortalidad infantil y materna. No fue sino hasta 1940, con la extendida institución de las condiciones de esterilidad que las tasas de mortalidad de los infantes asistidos por pediatras bajaron en comparación con las que existían cuando eran atendidas por las parteras.
Luego de la Segunda Guerra Mundial, las compañías privadas de seguros hicieron más accesibles los alumbramientos en los hospitales lo que resultó en que el número de nacimientos en los hospitales aumentara dramáticamente durante la década de los años 40 a 75 por ciento del total de alumbramientos. Y desde entonces, gracias a los avances de la neonatología las tasas de mortalidad infantil han caído, sustancialmente.

Durante el siglo XX, las nociones americanas de lo que debiera ser la infancia, se sometió a cambios tremendos. Las leyes sobre el trabajo infantil y la escuela obligatoria permitieron a los niños permanecer en las aulas de clase en lugar de en los campos y las fábricas. La aparición de campos de juego, escuelas preescolares y pediatras, todo contribuyó a hacer de la infancia un espacio más protegido de la existencia. Y debido a los avances en vacunas y mejor higiene, más niños vivieron para ver su vida adulta, más que en cualquier etapa previa.

martes, 23 de octubre de 2018

EL RELATO DE UN INMIGRANTE

ANCESTRY, traducción libre
… Nuestras experiencias en este viaje son tantas para recordar. El vapor pertenecía a la Línea Nacional y fue llamado el “Inglaterra”. Era un bote sobrecargado y no habíamos pasado dos días en el mar antes de que los funerales llegaran a ser muy frecuentes y fue hasta entonces que nos enteramos de que el Cólera estaba viajando con nosotros. Quizás el primer entierro en el mar que veíamos fue una horrible vista de un féretro colgado el lado del barco y la tapa abierta exponiendo el cuerpo del difunto.
Nuestra travesía duró seis días, pero se decidió entrar en cuarentena en Halifax en donde estuvimos dos semanas. Aquí, los muertos fueron enterrados en la Isla McNabs…
Después de haber estado dos semanas en Halifax zarpamos para Nueva York. Fuimos puestos en cuarentena de nuevo por dos semanas en Lower Bay… El recuerdo de este viaje es como una pesadilla. El apiñamiento de gente a bordo del barco “Inglaterra” fue nada menos que criminal. La desagradable notoriedad que el viaje le dio al vapor obligó a la Línea Nacional a cambiar de nombre y a poner el barco fuera de servicio…
Apenas un niño durante su viaje en 1866, Oliver Bacon Harden cuenta la agotadora travesía hacia los Estados Unidos desde Leicestershire en Recuerdos de mi Infancia, escrita en 1910.  La historia de Harden es solo una de las miles de la época que describe claramente los riesgos y retos increíbles que los inmigrantes enfrentaban al salir de sus patrias en busca de una nueva vida en América.

domingo, 21 de octubre de 2018

LA LLEGADA: LA ISLA ELLIS

Fuente: ANCESTRY, traducción libre.
Con menos de dos abrigos en su espalda y unas pocas monedas en sus bolsillos, muchos inmigrantes fueron recibidos en América por la Estatua de la Libertad, una gloriosa visión que reemplazaba en esperanza, las vicisitudes de la prolongada travesía. ¡Ay! Pero para algunos, este regocijo se desvanecía rápidamente en la Isla Ellis, cuando los inmigrantes recién llegados eran arreados dentro de los corrales de espera y obligados a esperar por horas, días, o semanas, antes de conocer su destino.
La Estación de Inmigración de la Isla Ellis, operó desde enero de 1892 hasta noviembre de 1954, ubicada cerca de la desembocadura del Rio Hudson a una milla en las afueras de Manhattan, pero a una vida de distancia sí un inmigrante no obtenía el permiso de pasar por las puertas de inmigración.
Solo los pasajeros del entrepuente eran requeridos a pasar por las inspecciones de salud, ya que los pasajeros de las cabinas de primera y segunda clase recibían sus revisiones médicas a bordo y la mayoría eran despachados por su propia cuenta. El resto, llamados la “plebe” tenían que ser clasificados antes de ser liberados para entrar en la “Ciudad Imperial”.
La primera orden del día era un examen físico. A medida que los inmigrantes caminaban a través de la gran sala, algunos eran marcados con símbolos con tiza, determinando su estatus.  Los doctores efectuaban” exámenes físicos de seis segundos”, evaluando las condiciones médicas de los inmigrantes de un vistazo. Luego, los inmigrantes eran interrogados con una serie de preguntas incluyendo nombre, ocupación, y capital financiero (con buena salud y un poco de dinero, un hombre era considerado un inmigrante deseable y las puertas de la Tierra Prometida volaban para abrirse).  Los inmigrantes pobres en cambio tenían que pasar exámenes de lectura, escritura e historia. Los inmigrantes más potentados no.
Solo 12 de los 17 millones de inmigrantes que llegaron a la Isla Ellis, entre 1892 y 1924 pudieron “tocar” suelo americano. Para el resto que fueron enviados de regreso, la Isla Ellis fue conocida como la “Isla de la angustia “o la “isla de las lágrimas”.


Pero para la mayoría, fue el comienzo de una nueva aventura y la oportunidad de vivir el “Sueño Americano”. 

sábado, 20 de octubre de 2018

LOS BARCOS EN LOS QUE VIAJARON

Fuente: ANCESTRY. Traducción libre.
Ellos vinieron en la era de los barcos de vela. Llegaron en los tiempos de los vapores. Y cuando los trasatlánticos dominaron la escena, llegaron aún más. ¿Cómo llegaron sus ancestros a América? Muy probablemente en barco.
En la década de 1840, se hicieron cerca de 3000 viajes trasatlánticos llevando más de 650,000 irlandeses que escapaban de la hambruna.
Los inmigrantes viajaron en barcos de vela de madera como la barca de tres palos Dunbrody que originalmente fue un barco de carga destinado a llevar madera desde Canadá y algodón desde los Estados Unidos. Una vez que el barco era descargado, los capitanes de buque rápidamente convertían el compartimiento de almacenaje en un improvisado entrepuente para pasajeros.

Tablas sueltas, atadas a las sentinas servían como piso temporal y filas de literas estrechas   eran acondicionadas con pajas como camas. Las compañías de barcos acomodarían a los inmigrantes como ganado, ansiosos de hacerse de su dinero.
En promedio tomaba de uno a dos meses cruzar a través del Atlántico, cuando el buen tiempo lo permitía. Algunas veces los barcos se hundían debido a la falta de herramientas de navegación o a la incapacidad del capitán. Los suministros de alimento y agua frecuentemente escaseaban.  Apiñados en la oscuridad y en cuartos húmedos, los ya de por si hambrientos y enfermos pasajeros, contraían tifoidea y cólera en números alarmantes. Muchos murieron en el mar por lo que estos transportadores de carga humana llegaron a conocerse como “barcos ataúdes” o “barcos de la fiebre”.
Después, los inmigrantes llegaron en barcos a vapor como el caso del casco de hierro, Inglaterra. En la primavera de 1866, ocurrió una gran tragedia mientras el barco se dirigía a Nueva York. Centenares de pasajeros murieron y cuarentenas fueron impuestas en la travesía.
Adentrados en el siglo XX, antes de la era de los aviones, los inmigrantes vieron por primera vez la Isla Ellis, desde los arcos del Británico, el Lusitania y el Reina Isabel, maravillas de máquinas de transporte a vapor y grandes símbolos para las naciones a los que pertenecían.

¿Qué cosa es aún más asombrosa?  Nuestros antepasados, que sobrepasaron tales peligros en el mar, luego tenían que empezar sin ventaja alguna a hacer su nueva vida en América.

viernes, 19 de octubre de 2018

INMIGRACIÓN

Fuente: ANCESTRY. Traducción libre.
¡Mantén las antiguas tierras de tus historias pomposas! Ella grita con labios silenciosos. Dame a tus cansadas, pobres y acurrucadas masas, el anhelo de respirar libre, el miserable rechazo de tu costa llena…” Extracto de “El nuevo Coloso” de Emma Lázarus.
EL ARRIBO A AMERICA
En 1864, Kirsti Semingsdatter de Noruega, se preparaba para salir de su tierra natal y navegar hacia América. Junto con enterrar a su hijo, fue la cosa más dura que ella había hecho. Ella estaba dejando atrás a sus padres, hermanos, hermanas, amigos, y la casa en donde había vivido por 20 años. Ella sabía de todo corazón que nunca volvería a ver a sus padres. Que nunca volvería a llorar ante la tumba de su hijo. Ella amaba su casa y su país, pero creía que una vida mejor le esperaba en América.
A finales del siglo XIX e inicios del siglo XX, millones de europeos abandonaron a sus seres queridos y todo lo que se sintiera familiar para venir a América en busca de una nueva vida. El hambre y la más abyecta pobreza, obligó a la gente abandonar todo lo que les era conocido. Agricultores irlandeses arrendatarios de tierras, dejaron la “Isla Esmeralda” en masa luego de la Hambruna de la Papa de 1845-1847. En Gran Bretaña, más de un tercio de la población salió en un periodo de 75 años, cuando el gobierno estimuló a sus ciudadanos pobres a emigrar para reducir la sobrepoblación y los problemas de indigencia.
Otros emigraron por razones religiosas. Muchos judíos rusos y de Europa Oriental, huyeron a América para escapar de persecuciones, mientras mormones conversos de Bretaña y Escandinavia, vinieron a América para juntarse con otros de su misma fe.
Dispuestos a enfrentar los peligros del viaje, todos los emigrantes compartían un sueño secreto, una esperanza. Ellos oían que América no tenía un Rey. Los hombres pobres podían llegar a ser ricos en la tierra de la oportunidad. Acres de tierra sin tocar esperaban para ser explotadas y el oro brotaba de la tierra. América significaba un sueño que valía la pena perseguir, un riesgo que valía la pena tomar.

Pero su apuesta valiente de decir adiós a sus familias con prolongados abrazos llorosos y dejar las costas de sus bien amadas patrias, era solo el comienzo de su travesía. Una extensa navegación traicionera a través del Atlántico les esperaba, proporcionando numerosas horas para contemplar la dura realidad que muchos serían rechazados al llegar sí sobrevivían el viaje.

lunes, 15 de octubre de 2018

VENTAS


VENTAS
Para garantizar la satisfacción de los clientes, los vendedores de bienes y servicios deben asegurarse de que lo ofrecido es  cierto y que al momento de utilizar lo adquirido, el comprador estará libre de sorpresas desagradables. Una buena venta debe estar ausente de medias verdades que puedan inducir al cliente, a devolver lo comprado.
Es posible que la política del engaño  responda al afán de los ejecutivos de un negocio por incrementar las ventas y que los vendedores solo responden a ese infortunado modus operandi. Sin embargo, a la hora de generarse una desavenencia el cliente señala al vendedor que busca asegurar su salario,  como responsable de su reacción, cuando la fuente del conflicto está en otro lugar y responde a otras motivaciones de lucro desaforado.
La peor actitud de un negocio al intentar expandir sus ventas es partir de la hipótesis de que todo cliente al que le ofrecen por ejemplo, un producto financiero como una tarjeta de crédito, no se percatará de que, al momento de utilizarla, los beneficios que le indicaron estaban incluidos en el instrumento de pago, eran exageradamente condicionados.
Cuando un cliente de tarjetas de crédito  tiene perfil  clase A porque paga sus saldos de contado,  la lectura que debe hacer un vendedor es que se encuentra ante alguien que toma en serio sus finanzas en cuanto a ingresos y gastos se refiere. El comportamiento de alguien que paga de contado no responde necesariamente a una persona de altos ingresos. Sencillamente se trata de alguien que analiza cuidadosamente las ventajas que otorgan los instrumentos financieros a favor de sus clientes y toma ventaja de ellas. Es un esquema en donde el cliente libra de dolores de cabeza al ente emisor.
La venta de beneficios ficticios de una tarjeta de crédito puede llegar a desarmar el equilibrio financiero que un cliente ha logrado establecer en el tiempo como consumidor de productos financieros y dañar su limpio comportamiento con otros entes del sistema con los que mantiene relaciones financieras.
En conclusión, las ventas amañadas atentan contra el cliente, la entidad misma que estimula este comportamiento perverso   y las otras entidades con las que el mismo cliente mantiene responsabilidades.




miércoles, 3 de octubre de 2018

TODO O NADA

En un banco estatal de Honduras había un antiguo empleado que le encantaba contar y compartir anécdotas sobre eventos de la institución que según él iban en contra de la lógica financiera que debe primar en una entidad cuyo giro principal es prestar dinero.
Indicaba con sorna que, en los períodos iniciales del banco, cuando un prestatario acudía a la ventanilla para pagar únicamente el principal, haciendo caso omiso -deliberado o no- del pago de intereses, el cajero rechazaba el pago y le indicaba que recibiría el dinero hasta que trajera completo el monto de capital e intereses del préstamo adeudado. Algunos prestatarios regresaban, pero los expedientes indicaban que la mayoría no lo hacía, mientras el índice de morosidad del banco aumentaba.   
Desde luego que las entidades financieras se rigen por normas establecidas tanto fuera como dentro de la institución. Pero los encargados de las operaciones cotidianas no deben olvidar que constituye una política desastrosa rechazar la entrada de fondos. Una entidad financiera, debe tener sumo cuidado en la salida de dinero; pero nunca obstaculizar las entradas de recursos y con mayor razón sí se trata de montos que le adeudan. De hecho, ese es un principio elemental que aplica a cualquier tipo de negocio.
A pesar de los avances tecnológicos la lógica financiera contraproducente de complicar pagos de obligaciones sigue vigente. Recientemente, en una sucursal bancaria de un mall capitalino, los clientes que requerían pagar sus saldos de tarjetas de crédito se encontraron con la sorpresa que se les impedía hacerlo porque “estaba caído el sistema”. Habían transcurrido dos horas rechazando pagos, hasta que un cliente le indicó a uno de los cajeros, quienes no habían consultado al gerente sobre una mejor opción, que no se retiraría de allí sin un recibo que indicara que había pagado su obligación. El impasse se resolvió con un recibo de caja.

Buena parte del secreto de la rentabilidad y efectividad de las instituciones financieras y demás negocios no radica en contratar agresivos cobradores de call centers que irrumpen la tranquilidad de los hogares con indeseables cobros de cuentas vencidas hace 10 años que no honraron exempleados de la casa contactada.  Recaudar un pago oportuno, garantiza mejor las operaciones de las instituciones que intentar rescatar deudas de personas con domicilio desconocido, cuyas obligaciones han sido castigadas contra reservas y que sencillamente ya prescribieron.